Realizar actividad física de manera regular ha dejado de ser cosa de “unos pocos” para estar cada vez más extendido en toda la población.
No importa el sexo, la edad o condición física: cada vez todos somos más conscientes de los beneficios que tiene sobre nuestras vidas hacer ejercicio y reservamos tiempo en nuestras agendas para entrenar.
¿Y qué mejor que una rutina personalizada con la que, además, ahorrar dinero? Te explicamos cómo:
¿Qué entrenamiento es el mejor?
Muchas veces nos preguntamos qué entrenamiento es el más adecuado, cuál es el más efectivo o con cuál veremos antes los resultados.
La respuesta a esta pregunta es que no hay un entrenamiento mejor que otro: el mejor entrenamiento es aquel que genera adherencia, es decir, que hace que seas constante y no abandones.
Los entrenamientos personalizados son cada vez más populares precisamente por esto: quienes cuentan con un entrenador personal encuentran menos dificultades para alcanzar sus objetivos y se toman más en serio sus rutinas.
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Las ventajas de los entrenamientos personalizados
Tanto para quien se quiera iniciar en la actividad física como para quien quiera mejorar su rendimiento, tener un entrenador personal es decisivo para progresar y de gran ayuda para mantener la motivación y la disciplina en las rutinas de ejercicios: ¡se acabaron las excusas!
Estos profesionales valoran cada caso de manera individualizada y, en función de los objetivos - pérdida de peso, mejora de la composición muscular, preparación de pruebas físicas - , marcan un plan de entrenamiento y, si es necesario, de alimentación.
No obstante, a pesar de todas estas ventajas hay un pequeño “pero”: un entrenamiento personal requiere un conocimiento muy exhaustivo de la actividad física por lo que, lógicamente, su precio no es bajo.
Cada una de estas sesiones suele rondar los 40 euros y lo ideal es hacer al menos 2 por semana.
Una alternativa más económica: el entrenamiento personalizado online
Aunque entrenar junto a un profesional es lo más recomendable para asegurar la buena ejecución de los ejercicios y evitar lesiones, hay una opción más económica: los entrenamientos personizados online.
Su precio puede ser hasta un 20% más barato que los presenciales, pero no es su única ventaja.
También son más flexibles, ya que normalmente el entrenador elabora el plan semanal o mensual y lo envía al usuario para que realice sus entrenamientos a la hora que quiera y donde quiera. Es decir, no hace falta cuadrar agendas.
Cada caso es diferente y, como tal, se adaptará mejor a un tipo de entrenamiento u otro.
Antes de “lanzarse” a cualquier opción, es conveniente tener una conversación sobre la condición física de la que se parte, el conocimiento - o no - de los ejercicios y la capacidad personal para cumplir con el plan.
Con esta información, el entrenador personal online podrá adaptar el entrenamiento y acompañarte para lograr tus objetivos.